Los avances tecnológicos que se han aplicado a los circuitos eléctricos y equipos eléctricos han provocado que tanto electricistas como técnicos deban estar a la altura de las circunstancias. Los obliga a prepararse y actualizarse constantemente, ya que un técnico mejor entrenado en el conocimiento básico de equipos de prueba enfrentará de manera más rápida y eficaz cualquier problema que se presente.
Es por ello que es importante conocer y saber acerca de una herramienta de comprobación como lo es la pinza amperimétrica. La misma es un comprobador eléctrico que combina un voltímetro con un comprobador tipo pinza. Como ha sucedido con otros instrumentos de medición y verificación, la pinza amperimétrica ha pasado de una etapa analógica a una digital. En un primer momento, la herramienta fue pensada para uso exclusivo de los electricistas, pero hoy en día poseen más funciones, son más precisas y poseen varias funciones de medida especiales.
Las pinzas amperimétricas cuentan con las funciones básicas de un multímetro digital, pero además, poseen las prestaciones de un transformador de corriente incorporado.
Gracias a la acción de este transformador, las pinzas amperimétricas tienen la capacidad de medir corrientes alternas de gran envergadura.
La capacidad de medir cualquier tipo de corriente alterna y directa, incluida la corriente estática, la corriente de carga y la corriente alterna, son de las capacidades que poseen estas pinzas, miden la corriente con sensores de efecto hall. Estos sensores, a diferencia de los sensores sencillos de inducción, detectan la cantidad de flujo magnético aplicado. El sensor de efecto hall, así, funciona cuando el flujo magnético aplicado es de tipo estático y no cambia. Una pinza amperimétrica contiene un núcleo de hierro toroidal que se cierra mediante un chip de efecto Hall en los extremos, de forma que el flujo magnético que provoca el cable que transporta la corriente pasa a través de él.
También funciona en campos magnéticos alternos.
Respecto a cómo elegir la pinza amperimétrica adecuada, se deberá poner atención en las características de cada uno, sus funcionalidades, diseño, y por sobre todo, la fiabilidad que debe tener ante situaciones complicadas. Tal como ocurre con toda herramienta eléctrica, la seguridad de quien lo manipula es primordial. Es por ello que es vital comprobar que la pinza amperimétrica elegida haya sido fabricada bajo los últimos estándares eléctricos, y haya sido sometido a las homologaciones y certificaciones correspondientes.
Fuente: TRANCELEC